Dialogo incesante
subconsciente
las voces de abrazan
despiertan del letargo
Desesperadas se unen
en locura permanente
se declaran
ante este sistema opresor
ante el poder desequilibrado
No consiguen amordazarlas
no admiten las cadenas
ni la imposición de que se callen
hablan, discurren,
piensa
Vuelan, relucen
en los charcos pintados
humedece
los cuerpos en sequía
comparten
sus fluidos cromáticos
Experiencias
que apabullan, encojen y duelen
que enseñan el propio infierno
Despeja las dudas para crear otras
enseñan la piedras
esas chinas en los zapato
para andar seguido
por cualquiera de los caminos